Annecy es una ciudad pintoresca en los Alpes franceses, conocida por su impresionante naturaleza y rica historia. La ciudad también ofrece una variedad de delicias gastronómicas que impresionan a los lugareños y turistas.
1. Cocina regional:
- Le Freti: Prueba platos tradicionales de Saboya, como fondue y raclette. Este restaurante ofrece una auténtica experiencia culinaria local.
- Auberge du Lyonnais: Situado justo en el canal, este restaurante ofrece platos inspirados en la cocina regional y productos de temporada.
2. Alta cocina:
- La Rotonde des Trésoms: Este restaurante en el hotel Les Trésoms es conocido por su exquisita alta cocina con énfasis en ingredientes locales.
- L'Esquisse: Con una estrella Michelin, este restaurante ofrece menús de degustación con platos innovadores que cambian según la temporada.
3. Cafés y panaderías:
- Châlet à Fondue: Un excelente lugar para almorzar con un ambiente acogedor y deliciosos pasteles.
- Philippe Rigollot: Esta impresionante panadería tiene pasteles que definitivamente vale la pena probar.
4. Mercados y tiendas:
- Marché de la Vieille Ville: No te pierdas este mercado para probar productos locales frescos, quesos, vinos y embutidos.
- Le Farto: Una tienda con una amplia selección de quesos y otros productos de la cocina de Saboya.
5. Vinos y bebidas:
- La Cave: Un bar de vinos que ofrece la mejor selección de vinos franceses, incluidas variedades regionales especiales.
- Brasserie du Mont Salève: Una cervecería cerca de Annecy que ofrece diversas variedades locales de cerveza artesanal.
6. Dulces delicias:
- Glacier des Alpes: Esta cafetería es famosa por sus deliciosos helados caseros y sorbetes.
- Pâtisserie Cezar: Prueba sus pasteles y postres de autor que deleitarán incluso a los gourmets más exigentes.
Consejos de planificación:
- La mejor época para visitar los establecimientos gastronómicos de Annecy es en otoño, cuando se realizan festivales regionales y ferias.
- Se recomienda hacer reservas en restaurantes populares con anticipación.
- No olvides probar los quesos locales, como el reblochon y el tomme de Savoie.
Annecy es un deleite no solo para los ojos, sino también para el paladar, lo que lo convierte en un destino obligado para los gastrónomos.