Carcasona - uno de los más famosos pueblos medievales de Francia, conocido por su impresionante fortaleza. Aquí tienes un ejemplo de un plan de dos días para disfrutar de este maravilloso lugar:
Día 1: Carcasona histórica
Mañana:
- La Ciudadela de Carcasona: comienza el día visitando la famosa fortaleza. Camina por las murallas y disfruta de las vistas de los alrededores. No te pierdas la Basílica de San Nazario y Santa Celicia, una elegante construcción gótica con impresionantes vitrales.
- Castillo Comtal: explora el castillo y sumérgete en la historia de la Francia medieval. El castillo alberga un museo con exposiciones interactivas.
Almuerzo:
- Come en uno de los restaurantes dentro de la ciudadela, donde puedes probar la tradicional cassoulet, un plato local de judías con carne.
Tarde:
- Pasea por las estrechas calles: descubre las tiendas de souvenirs, talleres y cafés ubicados en las calles medievales de la ciudadela.
Noche:
- Cena en un restaurante con vista: pasa la noche en uno de los restaurantes con vista a la fortaleza. La atmósfera al atardecer es especialmente impresionante.
Día 2: Alrededores de Carcasona y la ciudad moderna
Mañana:
- Canal du Midi: comienza el día con un paseo a lo largo de este canal histórico, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Puedes alquilar una bicicleta o caminar, disfrutando de la hermosa naturaleza.
- Mercados de Carcasona: visita los mercados diurnos de la ciudad para comprar productos locales frescos y recuerdos.
Almuerzo:
- Dirígete a un café para disfrutar de un almuerzo ligero con platos locales o haz un picnic en el parque cerca del canal.
Tarde:
- Bastide Saint-Louis: explora la parte más moderna de Carcasona, con sus amplias calles y pintorescas plazas. Visita el museo de artes visuales o pasea por la plaza Carnot.
Noche:
- Clases de cocina: termina tu estancia visitando una clase de cocina tradicional de la región de Languedoc.
En el segundo día, disfrutarás de una mezcla de atmosfera histórica y moderna que ofrece Carcasona. ¡Disfruta del viaje!